Un jardín japonés de ensueño iluminado por flores bioluminiscentes
Un jardín japonés de ensueño en perpetuo crepúsculo, bañado en flores de cerezo bioluminiscentes que emiten un suave resplandor rosa púrpura. Las linternas flotantes de papel se desplazan perezosamente a través de la escena, su luz cálida crea reflejos danzantes en un estanque koi similar a un espejo. La niebla etérea se teje entre antiguos caminos de piedra bordeados de hongos brillantes en tonos azules pastel y morados. Un puente de madera tradicional se arquea con gracia sobre el agua, espolvoreado con pétalos caídos que brillan como polvo de estrellas. La escena se captura a través de una lente cinematográfica con un bokeh perfecto, creando una atmósfera de otro mundo. En el fondo, una luna creciente cuelga increíblemente grande en el cielo, rodeada por un mar de estrellas y volutas aurorales en verde azulado y violeta. Las formaciones cristalinas emergen del suelo, refractando la luz ambiental en prismas de arco iris. Toda la composición sigue la proporción áurea, con una melancólica gradación de color similar a la película que recuerda al Studio Ghibli, mejorada por los rayos volumétricos de Dios que se filtran a través del follaje luminoso. Resolución 8K, fotografía magistral, hiperdetalle, realismo mágico.

Caleb