Un colorido rostro de dibujos animados en un paisaje urbano complejo

Una vibrante cara de dibujos animados llena de color se encuentra en el corazón de un paisaje urbano en expansión, que recuerda el intrincado estilo de Tim Doyle. Las formas industriales se entrelazan a la perfección, ocultando detalles intrincados dentro de sus diseños con matices oscuros. La escena adquiere una maestría solarizada, haciéndose eco de la esencia surrealista de la obra de Agustín Fernández, todo envuelto en la esencia del arte del cartel clásico. Cada rincón de la composición es rico en descubrimientos, ofreciendo capas de complejidad entretejidas con elementos sorprendentes que deleitan e intrigan, en un formato vertical alargado.